¿Por qué San Pedro en
Roma no es una catedral gótica?
Se puede responder diciendo que San Pedro fue construida en el periodo del Renacimiento
tardío, llamado también Manierismo; pero eso no haría otra cosa que replantear la
pregunta ¿Por qué se abandonó el estilo gótico de altísima perfección y belleza por
el nuevo estilo cúbico y de decoración pagana? Una respuesta sencilla es que la
Arquitectura del Renacimiento, al igual que la Pintura y la Escultura, tenía un
componente intelectual que la hacía bella. Era la expresión no solamente de un oficio
sino también de una idea. Todo el mundo coincide en este valor de las artes, de las seis
artes, como una relación diferente entre el trabajo mecánico y el trabajo intelectual:
una elevación de los valores conceptuales del arte. Y esta elevación era el producto de
un trabajo que combinaba la experimentación científica, la especulación teórica y el
oficio de la construcción de las nacientes ingenierías, en los amplios talleres de los
gremios del renacimiento italiano, algunos de los cuales, se transformaron en verdaderos
laboratorios. Estos talleres actuaban al mismo tiempo como industrias y escuelas. Los
aprendices del nuevo arte allí podían aprender el oficio de tallar la piedra y fundir el
bronce, junto a los de la pintura y la escultura, así como familiarizarse con los
rudimentos de la anatomía, la óptica, el cálculo, la perspectiva y la geometría.
Cuando cinco siglos después se le preguntó a Marcel Duchamp si el artista debería ir a
la universidad: contestó el padre del Arte Conceptual de nuestros tiempos, que estaba
convencido que era de la mayor importancia que el artista contemporáneo tuviese una
sólida formación teórica. Y, hoy, ya no se puede obviar la necesidad creciente de una
rigurosa formación en diversas disciplinas teóricas para comprender y dar cuenta de los
complicados mecanismos de los fenómenos del arte. La reflexión filosófica del arte,
bajo la mirada de la Estética o de la Teoría del Arte, y la Historia del Arte son, por
mencionar las más conspicuas, disciplinas que no solamente permiten indagar positivamente
en los fenómenos artísticos sino que a su vez los construyen en sus determinaciones de
usos complejos. Pero en los últimos años, además, se han incorporado nuevas relaciones
intercampos, como las nuevas ingenierias, las sociologías de lo cotidiano, las
tecnologías de los nuevos medios, el cuerpo de la medicina, o las modalidades de la
significación de la Semiótica. La disyuntiva es clara: o nos equipamos con herramientas
para comprender estos nuevos mapeos o declaramos, como los ignorantes de la academia a
comienzos de siglo ante el Arte Moderno, no entiendo qué quiso expresar el artista o,
peor aún, eso no es arte. El arte de hoy está llamado a participar en la sociedad de la
inteligencia.
VEREDA, es un proyecto orientado a dar instrumentos para manejarnos ante
dichos cambios o, mejor dicho, para sumergirnos en el proceloso delta de las vertiginosas
transformaciones de la cultura de fin de milenio. Un proyecto dirigido, sin distingo, a la
comunidad de las artes en el país. VEREDA, VENEZUELA RED DE ARTE es una red
teleinformática que conectará los centros y departamentos de investigación y curaduría
de las instituciones museísticas, las universidades e institutos de enseñanza, de tercer
y cuarto nivel, fundaciones y colecciones privadas, así como historiadores, críticos de
arte, y curadores independientes en una red temática académica y de investigación, con
directorios, listas de discusión, publicaciones electrónicas,videoconferencia en línea,
visualización gráfica de alta calidad y animación, mediante servicios de
supercomputación. Y además, de igual o mayor importancia, una estación de trabajo de
encrucijada de campos: arte, ciencia y tecnología que funcione como "Laboratorio de
Propuestas Artísticas de Encrucijada" donde los artistas puedan interactuar con la
ciencia y la tecnología, a la vez que a través de VEREDA en línea, para así explorar
sus posibilidades como medio creativo y difundir su obra en Internet. Una matriz de
proyectos de nuevo arte, una metaobra colectiva. En suma, VEREDA es un espacio libre y
abierto de reflexión, trabajo y creación en el único lugar donde todavía quedan
espacios libres: el ciberespacio.
Juan Astorga
Mérida Marzo 1999
