Scotto, Luigi

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Luigi Scotto
Nombre completo Luigi Scotto [Calcagno]
Nacimiento 17 de enero de 1920, Roma - Italia
Fallecimiento 15 de octubre de 1992, Caracas, Distrito Capital - Venezuela
Nacionalidad Italiano
Área Fotógrafo
Firma


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Contenido

Vida y obra

Fotógrafo. Produjo en Venezuela un cambio en la concepción y uso de la fotografía noticiosa. Hijo único de Diego Calcagno, periodista y poeta antifascista, y de Giovanna Margarita Scotto, actriz de teatro. Vivió su infancia y juventud en Italia, donde realizó estudios primarios y secundarios. A los 16 años viaja a Francia a visitar a su padre, quien se había exiliado allí debido a sus tendencias políticas. Regresa a Italia y en su ciudad natal se dedica a dibujar y a pintar al óleo como pasatiempo, pero finalmente decide ingresar en 1937 al Centro Sperimentale di Cinematografia di Cinecittá en Roma. En 1940 se alista como fotógrafo en el ejército italiano. Entre 1940 y 1943 se traslada al frente bélico de Libia y Egipto, siendo ésta su primera experiencia como corresponsal de guerra; en ese período visita también Abisinia (Etiopía). Fruto de su experiencia como fotógrafo de guerra es su convicción de que las imágenes pueden "mentir" al ser manipuladas por los grupos de poder. Llega a ser sargento del ejército italiano, recibiendo varias condecoraciones al valor. Al finalizar la guerra su padre insiste en que estudie derecho en Roma y aunque Scotto no está de acuerdo lo complace durante dos semestres. Entre 1946 y 1947 colabora con Il Tempo y Risurgimento Liberale, ambos diarios romanos.

Interrumpe sus estudios universitarios en 1947, cuando decide viajar a Nueva York con la intención de conocer América. En esta ciudad, donde pasa seis meses, realiza un curso avanzado de fotografía. Ese mismo año llega a Venezuela con la idea de visitar el país y estar sólo unos meses. Conoce a Edmundo "Gordo" Pérez, José Sardá y Héctor Rondón, entre otros reporteros gráficos. Para el año de su llegada a Venezuela, el diario Últimas Noticias necesita un fotógrafo, Scotto solicita el cargo y es aceptado. En 1954 publica un libro de poemas titulado Memoria y cuenta de mi alma, poco mencionado por el fotógrafo en las entrevistas de los años posteriores pues señala que en su caso el poeta está detrás de la cámara. En Últimas Noticias trabaja junto a Kotepa Delgado, Pedro Veroes y Sofía Imber hasta 1956, cuando regresa a Europa como corresponsal de la revista Momento. El mismo año de su partida y estando en París, esta publicación quiebra y Scotto se queda en Francia. Durante su estancia en París (1956-1959) trabaja para varias publicaciones europeas, como la revista France Dimanche y el diario romano Il Tempo, así como para las Publicaciones Capriles de Caracas. Junto a dos fotógrafos franceses funda una agencia de fotografía para prestarle servicio a la prensa francesa. Durante el primer año realiza dos viajes para cubrir sucesos importantes: la crisis del canal de Suez (Egipto) y la insurrección de Hungría. En 1959 regresa a Venezuela y durante un tiempo trabaja en la revista Élite como jefe de fotografía. En 1960 comienza a ejercer la jefatura de fotografía del diario La Verdad y, posteriormente, del diario Al Cierre. En 1969 participa en diversas publicaciones nacionales e internacionales y realiza fotografías para la presidencia de la República. Ese año también trabaja para Fundateatro, para la revista Líneas de la EDC y para la USB. Entre 1970 y 1974 trabaja como fotógrafo del Palacio de Miraflores (Caracas), colabora con las publicaciones del Concejo Municipal del Distrito Federal (Caracas), del Ministerio del Ambiente y de la Gobernación del Distrito Federal (Caracas). En ese período también realiza fotografías para publicaciones del MBA, así como para libros de Alfredo Boulton.

Durante la década de los sesenta y los setenta no tuvo trabajos estables, y al respecto Scotto comenta: "la historia de mi fracaso es larga, durante 20 años casi todos los editores de Caracas no se atrevían a publicar mis fotografías. Fueron 20 años de pura pérdida, ¿cómo iba a conocerme la gente? Para un fotógrafo atrevido es necesario un editor atrevido y eso fue lo que encontré con la salida de El Diario de Caracas" (1982, p. 27). El 2 de mayo de 1979 es lanzado El Diario de Caracas, dirigido por Tomás Eloy Martínez; Scotto dará en sus páginas una nueva dimensión al trabajo del reportero gráfico. En este sentido, sus trabajos recuerdan lo mejor del reporterismo internacional, ya que sus imágenes no se limitan a las anécdotas o la ironía sino a una verdadera esencia de la imagen perdurable. En 1980 recibe el Premio Nacional de Periodismo, mención fotografía. Ese año aparece en el número 100 de El Diario de Caracas una selección importante de sus trabajos (11 de mayo) y trabaja como corresponsal en Caracas para el Grupo Editor Olavarría. En 1981 se proyecta la creación de la Avef junto a Alexis Sequini, Hernán Alí Araujo, José Betancourt y Orlando Hernández. Ese año la Avef inaugura una exposición colectiva en la sede de la asociación, en el primer piso del CNP de Caracas, con trabajos de Alexis Pérez Luna, Orlando Hernández y Luigi Scotto, y en agosto organiza junto al MBA la "Primera muestra de fotografía contemporánea venezolana", coordinada por el Centro de Investigación y Difusión para las Artes Plásticas de América Latina, donde participa con cinco fotografías. En 1982 es miembro del jurado en el II Salón Nacional de Fotografía de Caracas. También forma parte del jurado para el Premio Conac de Fotografía Venezolana, en 1983.

Trabaja en El Diario de Caracas hasta 1982 cuando, por cambios en la orientación editorial, lo abandona y es contratado por El Nacional. Miguel Otero Silva, quien para ese momento presidía el diario, le encarga que sus fotos dialoguen con el público, que retrate la sociedad pospetrolera de la década de los ochenta mostrando su desilusión y su capacidad de recuperarse. En 1986 recibe el Premio Edmundo "Gordo" Pérez y en ocasión de la entrevista que le hace Santos López sobre este premio, Scotto recuerda el especial encargo de Otero Silva, y destaca su empeño en entender y poner en práctica el espíritu de aquella petición. Durante su estancia en este diario realiza una de sus series más importantes, Cárceles venezolanas. Estas imágenes acompañan una extensa serie de reportajes que, sobre el tema, fue abordado por el periódico. Entre 1986 y 1989 trabaja para la revista Horizontes de la línea aérea Avensa. Colabora con la revista Encuadre entre 1986 y 1992, participando en un amplio ciclo de reportajes, entrevistas y discusiones, relativos a temas de interés para los profesionales de la fotografía. En 1987 forma parte del Comité de Selección de Fotografías para la XIII Exposición Anual de Fotografía Documental, realizada para conmemorar el aniversario de la BN. En 1988 renuncia a El Nacional y durante un año trabaja para el grupo editorial Producto. Participa como jurado del concurso fotográfico "La inmigración italiana en Venezuela a través de la fotografía", organizado por la Casa de Italia y la Asociación Cultural Italo Venezolana (1988). Al año siguiente vuelve a El Diario de Caracas. En su producción destaca el tratamiento del personaje, gracias al cual se hizo famoso y temido entre los políticos venezolanos. Junto a la ya mencionada serie de las cárceles, se encuentra un amplio trabajo dedicado a las figuras de la vida pública venezolana. Además de ser rica fuente de inspiración para el fotógrafo, el tema representa un material de experimentación idóneo para perfeccionar su estudio del personaje, para algunos verdaderas radiografías espirituales. Scotto expresa en varias entrevistas su necesidad de destacar aquello que el personaje oculta, lo que realmente representa y que su fachada esconde. Para ello toma apuntes y estudia el personaje antes de retratarlo y así captar el instante preciso en el cual esta intimidad se revela. Le da más importancia a la búsqueda de una imagen coherente con un contenido claro que al hecho compositivo mismo, pues reconoce que el reportero gráfico no tiene mucho tiempo para preocuparse por ello y, en contraste, debe darle mayor importancia a la noticia que está detrás de la imagen captada por la cámara. Fotógrafo apasionado por la enseñanza, dicta conferencias en varias universidades e institutos de Caracas y, en el interior del país, es maestro de numerosos reporteros gráficos y tutor de varias tesis de periodismo; dicta también clases de luz y composición. Scotto trabaja en El Diario de Caracas hasta que el cáncer le propicia un retiro involuntario. Fallece a los 72 años de edad. Su trabajo se ha editado en publicaciones póstumas como la revista Viasar, y los libros Patios cerrados/puertas abiertas: cambios, democracia y partidos en Venezuela, de Joaquín Marta Sosa y La violencia en Venezuela, de varios autores (Caracas: Monte Ávila, 1994). En homenaje al artista, el SNTP crea un concurso fotográfico cuyo premio lleva su nombre.


Exposiciones individuales

  • 1982 "Luigi Scotto: Roma primer amor", Galería Serra, Caracas
  • 1987 "Los revulsivos", Sala La Fotografía, Ateneo de Caracas
  • 1988 "Las cárceles de Venezuela", Galería Fotográfica Mandril-Fundaimagen, Mérida
  • 1993 "Cárceles venezolanas", Galería Fotográfica Mandril-Fundaimagen, Mérida


Premios

  • 1979 Premio interno, El Diario de Caracas, Caracas
  • 1980 Premio Nacional de Periodismo, mención fotografía, Caracas
  • 1986 Premio Edmundo "Gordo" Pérez, El Nacional, Caracas
  • 1991 Premio de fotografía, Gobernación del Distrito Federal, Caracas


Colecciones

BN / El Nacional, Caracas

Fuentes

  • "El lente de Luigi Scotto, premio de la Gobernación". En: El Nacional. Caracas, 16 de julio de 1991, p. C/10.
  • Álvarez, Esso. "Luigi Scotto el escéptico". En: Economía Hoy. Caracas, 23 de octubre de 1992, p. 20.
  • Antillano, Laura. "Los revulsivos de Scotto". En: El Nacional. Caracas, 27 de septiembre de 1987.
  • Archivo El Nacional, Caracas, 68.863.
  • Archivo familia Scotto.
  • Boulton, María Teresa. Anotaciones sobre la fotografía venezolana contemporánea. Caracas: Monte Ávila, 1990.
  • Cinap, S 121.
  • Jiménez, Maritza. "La importancia de ser revulsivo". En: El Nacional. Caracas, 18 de septiembre de 1987, p. C/18.
  • López, Santos. "Ese maldito que soy". En: El Nacional. Caracas, 29 de julio de 1986, p. C/2.
  • Lugo, Omar. "La verdad de la imagen cambia según el ángulo en que se capte". En: El Nacional. Caracas, 21 de febrero de 1988, p. C/21.
  • P.J. "Con Luigi Scotto muere un poco el amor fotográfico". En: El Diario de Caracas. Caracas, 16 de octubre de 1992, p. 8.
  • Reinoso, Víctor Manuel. "Luigi Scotto, cazador del instante fugaz". En: El Nacional. Caracas, 4 de octubre de 1992.
  • Wisotzki, Rubén. "Sacar fotos es un acto de amor y de rapiña". En: El Diario de Caracas. Caracas, 16 de julio de 1991, pp. 44-45.


Créditos

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