ANTIGÜEDAD Los antiguos griegos buscaban en primer lugar una belleza sensible en la obra de arte, una belleza que se lograba por la mimesis y la imitación, cosa que repudiaba Platón ya que para él la imitación no era más que un engaño que afectaba el alma de los hombres, caso contrario ocurre con Aristóteles, ya que ve en el artista el que modela o transforma una materia informe a un producto formal dado por ciertas características de transformación y producción, donde el objeto se hace real alcanzando una forma definida gracias a la transformación de la materia siguiendo ciertos cánones y reglas para alcanzar una belleza sensible extraída de la imitación de la naturaleza en combinación con las ideas internas de belleza que lleva consigo el creador de la obra. Los griegos buscaban una perfección en sus obras, en especial en la escultura, donde entraban ciertos aspectos como lo son: simetría, anatomía, armonía, cánones de actitudes ya sea en reposo o en movimiento, ritmo y composición. Todas estas características se dan en la obra por un saber artístico o técnica artística que manejaba el creador de la obra, esto bajo el pensamiento aristotélico en que el artista basado en su conocimiento técnico o saber artístico realiza una obra dotada de belleza sensible. GRUPO LAOCOONTE de Agesandro, Polidiro y Atenodoro. Siglo I d. C. Esta obra es considerada como la última gran obra de la escultura griega. Se observa en esta obra el punto máximo de desarrollo escultórico, hay un gran desarrollo del movimiento y la expresión, se completó la conquista de la tercera dimensión, además se puede notar una composición piramidal donde se observan cuerpos, brazos y piernas entrelazados formando un verdadero enredo humano. Uno de los aspectos principales que refleja la belleza sensible es la actitud de los personajes. Esta actitud se da por el movimiento de los cuerpos que nos obligan a observar las líneas de contornos exteriores y la silueta general formada por el movimiento. En esta obre se abandona completamente la frontalidad dejando ver todos sus lados. Se observa que los artistas han llevado muy lejos el estudio del movimiento, tratando de llegar así a un realismo absoluto, procurando una gran belleza sensible donde se puede considerar como una instantánea del hecho ocurrido a estos personajes. Otro gran aspecto importante que denota belleza es la forma como están trabajados los rostros de los personajes, están realizados con un naturalismo tal que alcanza la perfección de la naturaleza, mostrándonos rostros que son muy expresivos. En el rostro del hombre mayor se observa una gran expresión de dolor, tristeza, impotencia y un sufrimiento que también se refleja en todo su cuerpo. Este rostro dirige su mirada al cielo pidiendo auxilio, bajo su frente se observan las cejas arqueadas lo que nos muestra el dolor, pero a su ves el personaje tiene el ceño fruncido lo que deja ver la resistencia al dolor, esto da un efecto de que las cejas sobresalgan. En cuanto a los rostros de los personajes jóvenes se puede ver la preocupación y aquel llamado de ayuda imposible de dar por el padre. En cuanto a la anatomía de los personajes los artistas supieron representar muy bien la estructura interna y externa del cuerpo humano. Esta anatomía se acerca a la realidad, se puede notar como el movimiento y el esfuerzo influyen en cada músculo y tendón de los cuerpos, donde la parte que se mueve va en función de todo el cuerpo, lo mismo que las partes en función del todo. Aquí es donde entra la armonía y el ritmo, se ve que cada parte está en función de un todo, nada parece añadido, sino todas las partes funcionan como una síntesis, donde todo se estudia en conjunto teniendo presente la unidad donde cada parte reacciona e influye sobre las otras partes restantes. La belleza sensible radica aquí en la unidad de la obra, exacta adaptación del detalle al conjunto buscando un perfecto equilibrio. También entran los cánones y proporciones para establecer una belleza sensible, estos cánones y proporciones son unidades de medidas y reglas donde las partes tienen una dimensión con respecto al todo y viceversa. En esta obra es difícil establecer los cánones y medidas ya que estas no radican en una regla universal que debían seguir todos los artistas, sino que cada uno manejaba sus proporciones y cánones en busca de una belleza que se acercara a la belleza natural, incluso estos cánones lograban mayor belleza dada por la misma naturaleza. Por todas estas características nombradas anteriormente se puede fijar la belleza sensible de la obra, ya que cumple con todos estos rasgos que le acercan a la realidad o a la naturaleza, dejando escapar esa gran técnica de los artistas griegos que era un requerimiento indispensable para la búsqueda de una belleza sensible que nos sumerge en la búsqueda de una belleza intelectual o que este más allá de lo meramente físico. |