Cambios

Salazar regresa a Venezuela en 1949 y retoma sus actividades docentes en Valencia. En 1953 es invitado por Carlos Raúl Villanueva para realizar un vitral para el Hospital de la Ciudad Universitaria, su única obra de contenido abstracto simbólico. Entre 1953 y 1964 realiza cinco murales para diversos edificios de Valencia. En 1956 vuelve a obtener el Premio Arturo Michelena con Constructor de sueños (colección Ateneo de Valencia, Edo. Carabobo). A partir de 1959 su preocupación por el realismo simbólico pasa a un segundo plano al aumentar su interés por el color y el dinamismo otorgado por la pincelada. Esta nueva inquietud plástica, sumada a su preocupación por la figura humana, lo lleva en la década de los sesenta a tratar el tema de la figura en el paisaje. En 1960 es elegido presidente de la Primera Convención de Directores de las Escuelas de Artes Plásticas del país. En 1963 recibe una vez más el Premio Arturo Michelena con Recogedoras de chamizas (colección Ateneo de Valencia, Edo. Carabobo) y en 1967 es nombrado jefe del taller de plástica del departamento de humanidades de la Facultad de Ingeniería en la UC. Fue fundador de la Escuela Armando Reverón de Barcelona (Edo. Anzoátegui) y de la Escuela Rafael Monasterios de Maracay. Trabaja como director y profesor de la Escuela Arturo Michelena hasta 1970. En 1982 realiza un mural-vitral para el Museo de Arte La Rinconada, en 1988 dos murales más y en 1989 el mural-vitral Raíces para la Plaza Bicentenaria de Caracas. Participa en exposiciones colectivas en Cuba, México, Estados Unidos, Francia, Colombia y Venezuela. En la exposición retrospectiva que la Galería Braulio Salazar hace en el artista (1987), Nadia Colasante se refiere a la persistente exploración que este artista ha realizado del retrato y la figura humana. La GAN posee de Salazar tres óleos sobre tela: Paisaje (1967), Motivación nº 1 (1968) y Entre breñas (1976).

==Exposiciones individuales==