Presentación
Todo acercamiento entre los seres humanos tiene la finalidad del diálogo, del entendimiento, de la afinidad, de intercambiar ideas, todo con el agrado de mejorar las relaciones materiales y espirituales. Nada mejor que una confrontación de arte que conjugue los valores éticos y estéticos y proporcione el lenguaje universal de comprension de la sensibilidad humana.
Sobran las razones de orden geográfico e histórico entre Venezuela y Colombia para un acercamiento cultural a través de las artes visuales. Lo creativo de ambos pueblos evidencia la razón de un potencial imaginativo que hermana sensiblemente el trayecto histórico de origen y de libertad compartiendo la misma esperanza de un pasado con un presente en procura de un futuro alentador que extienda y explaye una geografía sin fronteras como era deseo del Libertador Simón Bolivar.
Qué bien, reunir en Mérida por primera vez a un nutrido grupo de artistas y críticos de arte de ambos países, con sus inquietudes y propuestas artísticas para mostrar ese idioma común universal que une a los pueblos, romper fronteras y crear el espacio que estamós necesitando para contrarrestar el galopar avasallante de la tecnología y la información perniciosa.
Este encuentro entre los pueblos hermanos no debe quedar sólo en la ocupación de los espacios para exhibir durante el tiempo que ella dure, es más la intención de abrir conciencia sobre el tiempo y el espacio que corresponde vivir como una cultura integradora de convivencia permanente en la búsqueda de un destino comun.
Gracias a los artistas que han participado de los países, aceptados o no, a Instituciones y personas que han creído en esta forma de acercamiento de los pueblos.
Manuel de la Fuente
Comisario de la Bienal